Jorge Briones /
XALAPA, VER.- Tras ser arrollado por un autobús de la línea TRS, Luis Antonio Viveros Lara, un joven de 29 años de edad, quedó con severas secuelas irreversibles y nadie quiere hacerse responsable de la indemnización correspondiente que por ley le corresponde.
El joven, oriundo del municipio de Emiliano Zapata fue arrollado junto con su motocicleta por la pesada unidad cuando se encontraba en la entrada de la zona conocida como La Cumbre en Carrizal, el pasado 3 de noviembre de 2020.
Tras más de un año de demandas y solicitudes, ni el corporativo Golfo Pacífico ni la aseguradora GNP se han hecho responsables de responder por el accidente.
“La denuncia es contra el grupo Golfo Pacífico, contra GNP y contra el conductor de vehículo, producto de ese accidente él sufrió traumatismo craneoencefálico severo y algunas otras lesiones , el quedó con diversos daños mentales”, comentó la representante legal del joven, Iliana González García.
Aunque los médicos le daban pocas esperanzas de vida el joven logró sobrevivir pero lamentablemente con secuelas psicológicas y físicas de seriedad, y de acuerdo con los médicos ya no podrá retomar su vida de antes.
Luis era soldador industrial y el día del accidente había acudido a visitar a su pareja, se presume que el conductor del autobús habría actuado con dolo al pasarle varias veces el autobús por encima, ahora está vinculado a proceso.
La denuncia también pesa contra el trabajador del corporativo por su responsabilidad directa, además exigen le sea retirada la licencia y separado de su trabajo pues aún sigue operando y la unidad involucrada en el accidente continúa circulando.
