AMLO desmintió esta mañana las investigaciones publicadas en DW y ProPublica basadas en señalamientos desestimados y sin mayor evidencia; además, afirmó que la DEA está molesta con su gobierno por obligarlos a “sacar las manos del país”
Esta mañana, el presidente Andrés Manuel López Obrador se pronunció sobre los reportajes de los periodistas Anabel Hernández y Tim Golden publicadas en DW y ProPublica, respectivamente. El mandatario rechazó las acusaciones y aseguró que no hay ninguna prueba en su contra.
“Es completamente falso, es una calumnia, están desde luego muy molestos y lamentablemente la prensa, como hemos visto no sólo en México, está muy subordinada al poder”, declaró.
Lo anterior luego de que en ambas investigaciones se señalara que supuestamente, agentes de la Administración de Control de Drogas (DEA por sus siglas en inglés), habrían descubierto pruebas sobre aportaciones del Cártel de Sinaloa a la campaña presidencial del jefe del Ejecutivo en 2006.
Pero además, se destacó que en el trabajo de Tim Golden, el mismo periodista dijo que la investigación de la DEA no determinó de manera concluyente lo dicho. Por lo anterior, López Obrador desmintió ambos reportajes y aseguró que no se presentaron pruebas en dichas investigaciones debido a que no hay ninguna.
El Presidente señaló que este tipo de artículos se publican como parte de una guerra sucia del conservadurismo debido a los procesos electorales en México y Estados Unidos este 2024.
No obstante, afirmó que no emprenderá acciones legales contra los medios, pero sí acusó al gobierno estadounidense y a otras agencias por permitir estas prácticas y buscar intervenir en la vida pública de México.
“Denuncio al Gobierno de Estados Unidos de permitir estas prácticas inmorales y contrarias a la ética política que debe prevalecer en todos los gobiernos del mundo”, dijo.
Irregularidades en ambos reportajes
Vale la pena señalar que en entrevista con Luis Cárdenas, Mike Vigil, exjefe de Operaciones Internacionales de la DEA, afirmó que no hay ninguna evidencia de que López Obrador supiera algo sobre estos supuestos recursos en su campaña.
Asimismo, sostuvo que resulta extraño que en los juicios de ‘El Chapo’ Guzmán y Genaro García Luna, declararon muchas personas que pertenecían al Cártel de Sinaloa y nunca mencionaron al titular del Ejecutivo federal, únicamente a expresidentes como Enrique Peña Nieto o Felipe Calderón Hinojosa.
En ese sentido, aunque Vigil dijo no estar de acuerdo con algunas políticas de seguridad implementadas por López Obrador “no significa que se puedan lanzar acusaciones sin evidencias. Muchas veces la prensa se deja llevar por el sensacionalismo de una noticia”.
Pero además, sobre el reportaje de Tim Golden el mismo López Obrador recordó un dato clave que echa abajo el trabajo, y es que la principal fuente de la investigación de la DEA en su contra fue Roberto López Nájera, quien fuera testigo estrella de Felipe Calderón y García Luna, además de abogado de los Beltrán Leyva.
Regulación a la DEA
Además del contexto electoral en que se dan a conocer estas investigaciones basadas en señalamientos desestimados y sin mayor evidencia, resalta que López Obrador es el primer presidente en publicar una ley que regula la relación de servidores públicos con agentes extranjeros.
Desde 2021 se regulan y monitorean las actividades de los agentes extranjeros en el país con el fin de tener conocimiento sobre los hechos que puedan tener un impacto significativo en la vida del país o que representen una amenaza a la seguridad nacional.
Dicha ley por ejemplo, busca evitar que se repitan operaciones como «Rápido y Furioso” llevada a cabo durante el gobierno de Calderón en la que autoridades federales permitieron que la Agencia de Alcohol, Tabaco y Armas (ATF) de Estados Unidos vigilara el ingreso ilegal de más de dos mil armas a territorio nacional.
Por razones como esta, López Obrador afirmó que la DEA —involucrada en estos reportajes que se dieron a conocer el día de ayer— está molesta pues les obligó a “sacar las manos del país”.
