Ingredientes:
Para las gelatinas de colores:
1 sobre (85 g) de gelatina sabor fresa
1 sobre (85 g) de gelatina sabor piña
1 sobre (85 g) de gelatina sabor limón
1 sobre (85 g) de gelatina sabor naranja
4 tazas de agua caliente (una por cada sobre)
4 tazas de agua fría (una por cada sobre)
Para la gelatina de leche:
1 lata de leche condensada ( 395 g)
1 lata de leche evaporada (410 g)
1 taza de leche entera (250 ml)
2 sobres de gelatina sin sabor (14 g en total)
½ taza de agua fría (para hidratar la gelatina sin sabor)
1 cucharadita de esencia de vainilla (opcional)
Preparación paso a paso:
- Preparar las gelatinas de colores
Disuelve cada sobre de gelatina de sabor por separado:
En un recipiente, coloca 1 taza de agua caliente y agrega un sobre de gelatina. Mezcla hasta disolver completamente luego añade 1 taza de agua fría y mezcla.
Vierte cada gelatina en moldes rectangulares o planos (como un tupper o pyrex) y refrigera por al menos 4 horas o hasta que cuaje por completo.
Una vez firmes, corta en cubitos de 1 cm aproximadamente. Reserva en frío.
- Preparar la gelatina de leche
Hidrata la gelatina sin sabor en ½ taza de agua fría. Deja reposar 5–10 minutos.
Mientras tanto, en un bowl grande mezcla la leche condensada, la leche evaporada, leche entera y la esencia de vainilla
Calienta la gelatina sin sabor ya hidratada a baño maría o en microondas por unos 15 segundos (no debe hervir, solo derretirse).
Agrégala a la mezcla de leches y mezcla bien para que no queden grumos. - Integrar todo
En un molde grande corona (tipo savarín) de 2 litros engrasado ligeramente (puede ser con un poco de aceite neutro y retirado con servilleta), coloca los cubitos de gelatina ya cuajada, alternando colores para que queden distribuidos.
Vierte la mezcla de leche con cuidado, asegurándote de cubrir todos los cubos de gelatina.
Golpea ligeramente el molde contra la mesa para eliminar burbujas de aire.
Lleva al refrigerador por mínimo 4–6 horas, o hasta que esté completamente firme.
Pasa un cuchillo delgado por el borde del molde y sumérgelo en agua tibia unos segundos (sin mojar la gelatina).
Coloca un plato sobre el molde y voltea suavemente.
¡Listo para disfrutar!
Tips:
Puedes preparar los cubos de gelatina un día antes.
Si deseas, puedes usar moldes individuales.
La clave del brillo y definición está en dejar que cada capa cuaje bien y usar gelatina sin sabor bien disuelta
