Javier Landa
Xalapa, Ver.- Es la historia de Alfonso Torres, un hombre de más de 100 años que desde hace 20 vive en los baños de la unidad deportiva el “El Adoquín” en la colonia Rafael Lucio de la ciudad de Xalapa, Veracruz.
Vive con Rocky, un perro que hace 12 años rescató en las canchas de este lugar, ya que hasta hace unos meses se dedicaba a cuidar los juegos, levantar la basura, entre otras actividades para cuidar el espacio público.
Lamentablemente el señor hoy se encuentra en cama, y cada vez su situación se complica debido a sus 101 años, ya no escucha bien y levantarse de su cama improvisada es muy complicado para el.
Requiere atención médica constante ya que presenta complicaciones al respirar y un fuerte dolor en el pecho, a esto se suma que casi no escucha.
En breve entrevista, quien también fue zapatero de la zona por unos años, nos cuenta que no tiene familia y cada ves sus actividades se complican.
“Yo ya no puedo caminar, no hay nadie de mi familia que cuide de mí, yo solo tengo a mi hijo Rocky… Rocky Torres”.
Cuenta que hace más de una década conoció a quien ahora es su fiel compañero, a quien lo ve como un hijo.
“Yo conocí a Rocky hace como 12 años en estas canchas del adoquín, tenía su patita lastimada… lo cuidé, lo llevé al doctor y hoy es mi compañero”.
Tras preguntarle si estaría dispuesto a moverse a un espacio con mayor comodidad y mejores cuidados médicos, a cuenta gotas menciona que solo aceptaría irse con su compañero perruno, con quien ha pasado grandes cosas.
“Con mi perro hasta la muerte, el es mi hijo y yo no voy a ningún lado si no va el”.
El dueño de Rocky casi no escucha y es un poco difícil entablar una comunicación con el, mientras tanto el can lo resguarda en la entrada de los sanitarios.
Vecinos, organizaciones y activistas se han unido a brindarle atención médica y llevarle apoyos, pero necesita atención médica constante para que él pueda tener una respiración mejor.