INGREDIENTES
Gelatina de fresa:
2 paquetes de gelatina de fresa cada paquete para hacer 1 litro
6 tazas de agua hirviendo
2 tazas fresas picadas opcional
Gelatina blanca cremosa:
3 sobres grenetina o gelatina en polvo sin sabor 21 gr
1 taza de agua
1 lata leche evaporada 360 gr
1 lata leche condensada 384 gr
1 paquete queso crema 190 gr
PREPARACIÓN
Mezcla bien la gelatina de fresa en el agua hirviendo.
Vacía en unos moldes o pyrex engrasados.
Refrigera 3 a 4 horas o hasta que estén bien firmes. Corta con el cuchillo para hacer cubos.
Ayúdate con una espátula para separar todos. Refrigera hasta que se vaya a ensamblar la gelatina.
Gelatina blanca cremosa:
Mezcla la grenetina o gelatina sin sabor con el agua fría hasta que no queden grumos. Deja reposar 5 minutos. Calienta unos 30 segundos en el microondas o hasta que derrita.
Licua el queso crema, la leche evaporada y la leche condensada. Agrega la grenetina y licua bien.
Engrasa un molde con aceite o spray.
Vacía unos cubos de gelatina, un poco de fresas picadas y un poco de la mezcla de gelatina blanca. Mueve el molde para que se acomode y no queden burbujas.
Repite lo mismo en varias capas hasta que se llene el molde.
Refrigera unas 4 a 6 horas más o hasta que esté completamente cuajada.
Separa todas las orillas con los dedos. Para asegurarte que no se te pegue en el fondo
puedes sumergir el molde en agua caliente por unos 3 segundos.
Desmolda, decora si lo deseas y refrigera hasta servir.
