Por Luis Ortiz
Madres de familia denunciaron al maestro Azael “N”, de la escuela Antonio Caso, ubicada en el Infonavit Buena Vista, por tocamientos y abuso erótico en contra de al menos 4 niñas de 9 y 10 años de edad.
Dulce María González, manifestó que después de que circuló en redes sociales una denuncia en contra del maestro y al preguntarle a su hija sobre esta situación, decidió acudir a interponer la denuncia correspondiente ante la Fiscalía General del Estado.
“Yo hablé con mi hija de 9 años y le pregunté si alguna vez había escuchado algo raro en la escuela que la pusiera incómoda y me dijo que no, le pregunté si alguna vez el maestro la tocó de manera que la hiciera sentir incómoda y me dijo que sí, nos mostró cómo la tomaba de la cintura, le bajaba la mano a su glúteo y le tocaba la pierna, también hay una compañera a quien le tomó una foto por debajo de la falda y se las sienta en las piernas”.
Afirmó que el director decidió retirar al maestro del grupo y está tratando de que el asunto no sea de conocimiento público.
Al acudir a una reunión con la supervisora escolar en el Palacio Federal de Veracruz, señaló que la subdelegada les está solicitando testigos, pruebas y hasta fotografías, sin embargo, solo se aceptarán testimonios del 13 de marzo en adelante.
Por su parte, la señora Yanet Delgado Molina, mamá de la joven que denunció en redes sociales que hace 8 años fue violentada por el profesor, recordó que la niña ya no salía al recreo y siempre estaba con el maestro, pero la menor no quería decir nada al respecto hasta que ingresó a segundo de secundaria y a los 14 años fue cuando decidió decirle lo que le sucedió con el maestro.
“Mi hija me confiesa que el maestro la tocaba, que le tocaba sus partes íntimas por debajo del uniforme dentro del salón de clases, le jugueteaba con el bra por debajo de la blusa, eso fue en sexto, en cuarto solo había mucho cariño, como que se la ganó. Quisimos proceder legalmente y nos asesoramos pero no teníamos pruebas físicas, el abogado nos aconsejó que no lo hiciéramos y tratáramos a mi hija psicológicamente”.
Indicó que la niña acudía a la casa del maestro a clases de taekwondo y también sufría tocamientos en el baño.
