Luis Ortiz
La obra de rehabilitación de la avenida Independencia, en el tramo comprendido entre las calles Mario Molina y Lerdo, se extenderá por aproximadamente tres meses. Según Julio César Torres Sánchez, director de Obras Públicas, se planea terminar el colector que viene desde la calle Zamora para conectarlo a Independencia en el plazo de un mes.
Paralelamente, se elevará el arroyo vehicular al nivel del zócalo, con el objetivo de convertir la avenida en una zona peatonal los fines de semana. Cabe destacar que la peatonalización será parcial y se contempla una fase de prueba piloto.
«Estaremos trabajando hasta mediados de septiembre u octubre. Es una obra, tenemos una agenda pero diferentes circunstancias como las lluvias, que no nos han tocado muy fuerte, pero de alguna manera nos pueden atrasar porque vamos a demoler e intervenir el subsuelo y son trabajos que requieren tratamiento para meter un sistema, seque, y seguir trabajando», explicó Torres Sánchez.
A pesar del cierre a la circulación vehicular en la avenida Independencia, las banquetas permanecen libres para que las personas puedan transitar por la zona. La calle Zamora, entre 5 de Mayo e Independencia, también sigue parcialmente cerrada.
En el centro histórico, los trabajos avanzan conforme al plan, con un reporte de avance del 50%. La intención es que la avenida Independencia se convierta en una vía peatonal los fines de semana, para lo cual será necesario nivelar la banqueta del zócalo con el arroyo vehicular existente.
